sábado, 28 de septiembre de 2013

Europa 2025: las cenizas de la austeridad

Intermón Oxfam, una de las más importantes ONG del mundo, advierte del desolador coste de las actuales políticas para solucionar la crisis: entre 15 y 25 millones más de pobres, la población conjunta de Austria y Países Bajos. Un drama que tendría repercusiones en el conjunto de la sociedad. La Unión Europea no ha aprendido de las experiencias pasadas en América Latina, África subsahariana y el este asiático, que aplicaron, sin éxito, las mismas recetas en las décadas de los ochenta y noventa.
 
 
Me gustaría que Merkel entendiese que la austeridad empeora el comportamiento de la economía. Aumenta el nivel de desempleo, disminuye los salarios y crea más desigualdad. No existe ningún ejemplo de una gran economía que haya vuelto a crecer gracias a la austeridad”. Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía en 2001 y execonomista jefe del Banco Mundial, avisaba a la canciller (gran promotora de los recortes) durante la campaña electoral de las últimas elecciones alemanas sobre las funestas consecuencias de sus políticas económicas basadas en una reprimenda moral a los ciudadanos (que deben expiar sus pecados por gastar de más) y en un salvavidas incondicional al sistema financiero (libre de todo culpa).

domingo, 22 de septiembre de 2013

La tijera de Wert tambalea al sistema educativo español

Casi 600.000 alumnos perdieron las ayudas para libros de texto en el pasado curso tras un impresentable recorte del 47% (un total de 67 millones) del Ministerio de Educación. Las becas no universitarias también empiezan a escasear con unas plantillas de profesores aligeradas. La comunidad educativa ha explotado mientras el Gobierno y su ministro se parapetan ante una ofensiva que consideran política. ¡Será que los ‘profes’, los niños y sus papás son todos unos ‘rojazos’, no te digo! No hay futuro sin formación, pero la formación tiene ahora un precio, el precio de la crisis. Paga una recesión económica que no ha provocado.
 
 
Dice el Talmud judío que “el futuro del mundo pende del aliento de los niños que van a la escuela”. No parece que el actual Gobierno español comparta esta trascendental y acertada visión del papel de la educación como vehículo de progreso de las sociedades. En medio de una brutal crisis económica de ciclo largo y resolución indeterminada, el Ejecutivo de Mariano Rajoy no ha dudado en afilar las tijeras para recortar uno de los grandes pilares del Estado del Bienestar y uno de los principales factores para el avance de cualquier país: el sector educativo.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Diada 2013: el peligro de la ruptura definitiva

Cataluña, por voluntad propia, se ha colocado al borde de una vital disyuntiva. La sociedad catalana se encuentra en un cruce de caminos. Una decisión que marcará el futuro de sus actuales ciudadanos y sus próximas generaciones. Ante sus ojos, se abren dos posibles salidas: seguir con España con la misma relación política de los últimos años (no parece viable, con el actual Gobierno del PP, que se explore la alternativa del federalismo) u optar por la independencia. La ruptura seduce más que la continuidad. Pero, ¿han valorado y reflexionado los catalanes con calma y serenidad sobre las consecuencias de un proceso independentista? A la hora de decidirse por uno u otro camino, el corazón y la cartera, motivos, a fin de cuentas, pasionales, no pueden mandar sobre el cerebro, sobre un necesario debate personal intelectual de cada catalán. No es un juego. Y no hay marcha atrás.

 
La Diada de 2012 sobrepasó incluso las expectativas más optimistas del independentismo catalán. Las calles de Barcelona fueron un clamor. Artur Mas, con una acción política muy cuestionada en la Generalitat aplicando incluso más recortes que el Gobierno de Mariano Rajoy, se sumó al carro y convocó unas elecciones que le salieron bastante mal. Mas, que soñaba con pasar a los libros de historia como el libertador del pueblo catalán, quedó muy debilitado. ERC fue en la práctica la ganadora en las urnas. Nada se mueve ahora mismo en Cataluña sin el beneplácito de la formación independentista catalana por antonomasia. ERC, con un elevado componente social en su ideario político, ha optado por focalizar sus esfuerzos en su gran sueño: la independencia. La formación liderada por Oriol Junqueras nunca la ha visto tan cerca y no quiere perder la oportunidad.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

España vota por Tokio 2020 o Estambul 2020

La candidatura olímpica de Madrid, la tercera, tiene un bajísimo apoyo social por más que los políticos y determinados medios de comunicación progubernamentales digan lo contrario. El entusiasmo popular es mínimo. Casi nadie desea unos Juegos en un país con necesidades mucho más importantes e inminentes, con el empleo a la cabeza, y con una corrupción salvaje que llena páginas de periódicos y minutos de radio y televisión. No estamos hablando de un proyecto económico interesante en el medio y largo plazo. Parece más una cabezonada y un capricho de las instituciones madrileñas que siguen viviendo su particular sueño alejado de la realidad cotidiana de sus ciudadanos. Un megaproyecto que no precisan ni España ni Madrid, con el Ayuntamiento más endeudado de Europa.

 
El Comité Olímpico Internacional (COI) designará este sábado en Buenos Aires a la ciudad que albergará los Juegos Olímpicos de 2020. Madrid, por tercera vez consecutiva, opta a organizar la mayor fiesta del deporte mundial. Hace ocho años, perdió la carrera con París y con Londres, finalmente ganadora. Hace cuatro, Rio de Janeiro se llevó la última votación contra la ciudad madrileña. Los 98 miembros del COI decidirán en esta ocasión entre tres candidaturas: Madrid, Tokio y Estambul. Señores del COI, sepan que mi voto como español es para Tokio o Estambul. Y no se crean que soy un caso único ni he sufrido un ataque agudo de antipatriotismo. La candidatura olímpica de Madrid es más un empeño político que social. Señores miembros del COI, ¡no queremos los Juegos!